En Control, DLSS 2.0 permite a los jugadores elegir el comportamiento de DLSS según prefieran: rendimiento máximo, calidad máxima o un balance entre ambos. Para hacer esto, hay que habilitar DLSS desde el juego, seleccionar la resolución de pantalla y luego la resolución de renderización de DLSS, que es equivalente a los modos Calidad, Balanceado y Rendimiento presentes en otros juegos compatibles con DLSS 2.0.
En 1920 × 1080 y 2560 × 1440, el modo Calidad de DLSS 2.0 optimiza el rendimiento en un 76% en nuestras pruebas. Y en 4K (3840 × 2160), el modo Rendimiento proporciona entre el doble y el triple de mejoras de rendimiento, lo que permite a los jugadores con GeForce RTX 2060 jugar con los ajustes al máximo y a una frecuencia de cuadros estable.