Los operadores de telecomunicaciones pueden utilizar sus data centers regionales distribuidos (RDC) como infraestructura de computación acelerada para construir, ajustar e implementar modelos de IA soberanos. Esto permite que los modelos de IA se alineen con los intereses de seguridad nacional, reduce los costos de inferencia mediante la implementación de aplicaciones de IA para usuarios de la región y mejora la eficiencia energética de la IA generativa mediante el uso de la infraestructura de computación existente. Las redes de telecomunicaciones combinadas con la IA permitirán a las empresas transferir datos a través de la nube de IA a altas velocidades, permitiéndoles llevar eficazmente la nube de IA a las puertas de cada empresa.